Estos últimos días se vivió el cierre de una temporada de verano que cumplió con las expectativas que se tenía.

Pese al mal clima la demanda turística, este fin de semana largo, fue muy alta.
La caída de plazas hoteleras, tras la pandemia, cobró factura esta temporada; con varios hoteles cerrados la alta demanda turística que hubo este fin de semana no pudo cubrirse.

El mal clima jugó una muy mala pasada, no permitiendo que los camping pudieran trabajar como se esperaba, empujando a los turistas a solicitar alojamiento en lugares cerrados, los cuales se encontraban completos. Del mismo modo los turistas no pudieron disfrutar de todas las actividades al aire libre que ofrece la ciudad: visitas a viñedos y reservas naturales, paseos en lancha y excursiones, playas y cabalgatas, etc.

A pesar de todo, las ganas de vivir la gran fiesta del carnaval fue mayor; el color y la alegría le ganaron al mal tiempo, con un corsódromo que vibró en todo su esplendor y encendió la pasión de miles de personas cada noche. Un trabajo increíble por parte de la Comisión del Carnaval y de los cinco clubes participantes, quienes no bajaron los brazos para que el espectáculo a cielo abierto más grande del país, pudiera realizarse sin problemas.

Durante estos días, las termas también trabajaron a su capacidad máxima, ya que tuvieron que cerrar sus puertas para el visitante.

Los turistas disfrutaron de un fin de semana diferente, tranquilos y seguros.
Desde la Asociación de Hoteleros y Gastronómicos agradecemos todo el trabajo y el esfuerzo realizado por los prestadores para llevar adelante un fin de semana que desbordó de turistas.

También agradecemos a los distintos organismos públicos, municipalidad y fuerzas de seguridad, por los servicios brindados a los turistas de manera respetuosa, haciendo que se sintieran seguros y cuidados en nuestra ciudad.

Agradecemos a todas y cada una de las partes que hacen que esta gran maquinaria, que es el sector turístico, funcione de la mejor manera para lograr un trabajo equilibrado y fluido para que el turista se sienta bienvenido y cuidado.